La Iglesia celebra el día de la Acción Católica y del Apostolado Seglar el domingo de Pentecostés: "debemos tener esperanza"

"Es un día doblemente especial", dice Susana Arregui sobre el domingo de Pentecostés que coincide con la celebración del día de la Acción Católica y el Apostolado Seglar y el año jubilar. Ella es la directora del Secretariado del Apostolado Seglar de la Archidiócesis de Madrid y ha venido a 'Ecclesia Al Día' para hablar sobre el papel de los laicos para poder ser esperanza para el mundo, que es el lema de esta celebración.

"Empezaríamos dándonos esperanza entre nosotros, sintiéndonos comunidad y comunión. A partir de ahí, salir al mundo, en nuestra casa, trabajo, entorno social... Vivimos en un mundo muy desesperanzado, lo vemos en nuestros jóvenes, la esperanza es una carencia y la Iglesia nos invita a ser una esperanza que tenemos el deber de tener", asegura Susana refiriéndose a la alegría y esperanza que son inherentes al cristiano.

Los laicos, normalmente, viven su fe agrupados en congregaciones, parroquias, etcétera. Para Susana, este hecho tiene muchas ventajas para transmitir la fe, "una de ellas es porque normalmente se vive a través de un carisma, que es el camino por el que nos ha llamado a llevar Jesucristo". Cada uno recorre el camino con diferentes circunstancias, pero todos vamos en la misma dirección. Además, es muy importante la unidad, no ya dentro de cada movimiento, sino entre movimientos diferentes.

"Nuestra misión principal es en el mundo", asegura Susana que insiste en que todo bautizado es apóstol: "somos corresponsables de la misión de la Iglesia". La idea es que somos capaces de dar alegría, los que se sienten atraídos por las comunidades católicas lo hacen porque se sienten acogidos allí.  Debemos, por tanto, atrevernos a acercarnos a todos los sitios, incluidos aquellos en los que pensamos que no seremos bien recibidos, porque ahí también tenemos muchas cosas que aportar.