Detienen a un grupo criminal que envasaba pimientos de cristal en unas condiciones higiénico sanitarias deplorables y que vendían en restaurantes de Soria y otras provincias

La Guardia Civil ha detenido a un grupo criminal dedicado a la venta de pimientos de cristal en conserva que estaban en condiciones higiénico sanitarias deplorables y que se vendían a restaurantes y otros establecimientos de Soria, Navarra, País Vasco, La Rioja y Zaragoza.

Los detenidos son tres varones y se investiga también a una mujer como presuntos autores todos ellos de un delito contra la salud pública, de estafa, de falsedad documental y de pertenencia a grupo criminal.

Las investigaciones se iniciaron tras una intervención de la patrulla del Seprona de Castejón en una finca situada en Tudela (Navarra) debido a un pequeño incendio.

Los agentes pudieron observar unos botes de conserva de pimientos que tenían una etiqueta amarilla que anunciaba pimientos de cristal asados con carbón y pelados a mano.

A raíz se este hallazgo se inició una investigación al propietario de la finca y se comprobó que los implicados compraban pimientos variedad rojo italiano, los asaban, pelaban y metían en botes de cristal para venderlos como conserva pero sin tener las condiciones higiénico sanitarias establecidas. Los integrantes de este grupo vendían el producto a restaurantes y establecimientos haciéndolos pasar por un producto gourmet pero careciendo de la autorizaron para vender este tipo de productos.

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De este modo conseguían quintuplicar sus beneficios al adquirir una variedad de pimiento más barata pero haciéndola pasar por una más cara para el consumidor y sin pasar los controles de sanidad y calidad obligatorios. Las conservas se realizaban además en unas condiciones higiénicas deplorables y poniendo en riesgo la salud de las personas.

Los botes de la variedad “Pimientos de Cristal” se vendían en restaurantes de Soria, Navarra, País Vasco, La Rioja y Zaragoza tras suplantar un código de barras de una empresa diferente, añadiendo una etiqueta con un número de registro caducado y careciendo de trazabilidad y de cualquier tipo de control sanitario.

Los agentes del Seprona han podido intervenir más de 1.200 botes de conserva que no cumplían las condiciones sanitarias y que podían haber provocado un grave perjuicio para la salud de las personas.

Los detenidos son un hombre de 66 años y nacionalidad española, y otros dos varones de 48 y 33 años de nacionalidad marroquí, todos ellos residentes en Tudela (Navarra). Se investiga también a una mujer de 33 años de nacionalidad marroquí y residente en Tudela.

Las diligencias han sido remitidas al Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción número 2 de Tudela.